Vivir y estudiar en Europa: mitos vs realidad

Europa es un destino popular para aquellos que desean vivir y estudiar en el extranjero. Sin embargo, probablemente hayas escuchado varios mitos que pueden disuadirte de aprovechar esta oportunidad. A continuación, desmentiremos cinco de los mitos más comunes que las personas suelen creer a la hora de pensar en estudiar en europa, para ofrecerte una perspectiva más clara y precisa.

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1. "Estudiar en Europa es muy caro"

Seguro has escuchado esto, almenos una vez. Es cierto que algunas ciudades europeas, como Londres, París o Zúrich, tienen un costo de vida alto. Sin embargo, Europa también ofrece en muchas ciudades y países un costo de vida asequible para estudiantes como, por ejemplo: España, Portugal, Polonia y Hungría los cuales ofrecen educación de alta calidad a precios razonables y un costo de vida mucho más bajo en comparación con otros países occidentales; Además, algunos países europeos ofrecen educación superior gratuita o becas y ayudas financieras para estudiantes internacionales. Países como Alemania, Noruega y Finlandia destacan por sus bajas tasas de matrícula, incluso para extranjeros.

2. "Es difícil obtener una visa de estudiante"

Aunque el proceso puede parecer complicado, muchos países europeos facilitan la obtención de visas de estudiante para aquellos que han sido aceptados en una institución educativa. Si bien el proceso puede variar según el país, muchos países europeos tienen procedimientos claros y accesibles para estudiantes internacionales. Solo debes asegurarte de cumplir con los requisitos y presentar la documentación adecuada cuando esta te sea solicitada. Además, muchos países ofrecen visas de trabajo post-estudio para que los graduados puedan permanecer y trabajar, así que no solo tendrás la oportunidad de mejorar tus oportunidades académicas sino también las laborales.

3. "Es difícil encontrar alojamiento"

Encontrar alojamiento puede ser un desafío en cualquier parte del mundo, pero para la suerte de los estudiantes internacionales muchas universidades europeas ofrecen residencias estudiantiles a precios razonables. También existen numerosas opciones de alojamiento privado, desde apartamentos compartidos hasta alojamientos con familias anfitrionas. Además, hay muchas plataformas y servicios dedicados a ayudar a los estudiantes internacionales a encontrar alojamiento seguro y asequible.

4. ¿Vida social limitada?

Europa es increíblemente diversa, y su riqueza cultural significa que hay algo para todos. Los europeos son generalmente acogedores y están acostumbrados a la presencia de estudiantes internacionales, además como las universidades europeas suelen acoger a estudiantes de todo el mundo, es mucho más fácil de lo que se cree el formar una amplia red social. En estas se ofrece una amplia gama de actividades extracurriculares, desde clubes deportivos hasta sociedades culturales y académicas que ayudan a los estudiantes a integrarse y hacer amigos, por lo cual, tu vida social será mucho más activa que nunca.

5. "Sólo las grandes ciudades son buenas para estudiar"

Muchas de las mejores universidades europeas se encuentran en ciudades pequeñas y medianas que ofrecen un ambiente de estudio tranquilo y concentrado. Como por ejemplo la Universidad de Heidelberg que se encuentra ubicada en una pequeña ciudad alemana, pero está calificada como una de las universidades más prestigiosas del mundo. Estas pequeñas ciudades suelen ser más asequibles a nivel económico y ofrecen una calidad de vida excelente, puesto que son pensadas y utilizadas como ciudades universitarias así que cuentan con una amplia población juvenil.


¿Estas listo para ampliar tu mundo académico?

Vivir y estudiar en Europa puede ser una experiencia increíblemente gratificante y transformadora que te ofrece numerosas ventajas y oportunidades tanto académicas como laborales. Después de leer este artículo, esperamos que te animes a explorar las numerosas oportunidades que este diverso y emocionante continente tiene para ofrecerte, no dejes que otra persona te cuente cómo es estudiar en Europa, arriésgate a vivirlo, puesto que con una planificación adecuada y una mente abierta estudiar en Europa es posible.