Costumbres de Marruecos
Marruecos se sitúa en el norte de África y ha sido un país referencia en el mundo árabe por su estabilidad política y la fuerte afluencia turística de los últimos años, convirtiéndolo en un destino de obligada visita para muchos europeos. Así, hay que destacar que su historia ha sido muy larga y que la mezcla de culturas que ha vivido durante varios siglos, ha convertido a Marruecos en una amalgama de tradiciones y costumbres, mezclando algunas de las potencias colonizadoras del pasado como Francia o España, adaptando otras del mundo árabe o simplemente teniendo las suyas propias.
Una de las costumbres más habituales y, en principio, más fáciles de identificar en el país, es el alto consumo de té. No solamente verás a hombres y mujeres disfrutar de la bebida en terrazas y restaurantes del país, también es muy habitual que se ofrezca cuando entras a una tienda a comprar o cuando llegas a un hotel (o un riad). Es una forma de recibir a la persona de una forma amigable y, para aquellos a los que se conoce, de establecer una primera conexión. Si además es de menta, es que 'has caido genial'. Y si te invitan a una casa, no olvides que tienes que dejar tus zapatos en la puerta. Así, podrás tomarte un té y disfrutar de una bienvenida marroquí. Si después de eso, te invitan a comer, lávate las manos antes y espera a que los propietarios de la casa oren, es algo importante por su caracter religioso.
Regatear en Marruecos
Y al igual que regatear, cuando vas a un bar, un restaurante o te hacen una visita turítica, la propina es más que necesaria. Se trata de dar el 10% de lo que ha costado el servicio y si uno se siente generoso, puede pensar que dejar 10-20 DHR está bastante bien. Si no sabe qué cantidad dejar, simplemente redondea y así te evitarás tener que calcular con el estómago lleno.