Pretérito imperfecto en español: Formación, uso y ejemplos

El pretérito imperfecto se utiliza en diversas situaciones, como para describir acciones habituales en el pasado, expresar el tiempo en que ocurría una acción simultánea a otra en el pasado, narrar situaciones en el pasado, describir características físicas o mentales en el pasado, entre otras. Es uno de los tiempos verbales más utilizados en narraciones y descripciones en español.

La formación del imperfecto es bastante regular en español para la mayoría de los verbos. La terminación de los verbos en -ar, -er y -ir es la misma para la mayoría de los pronombres personales. Aquí tienes la conjugación del imperfecto para tres verbos regulares: "hablar" (verbo -ar), "comer" (verbo -er) y "vivir" (verbo -ir):

1. Hábitos o acciones repetitivas en el pasado: El imperfecto se usa para describir acciones que ocurrían de manera frecuente o repetida en el pasado. Por ejemplo:

   "Todos los días caminaba al parque".

2. Descripción del escenario o ambiente en el pasado: Se utiliza para establecer el escenario o la situación en un momento específico del pasado. Por ejemplo:

   "Era un día soleado y los pájaros cantaban".

3. Edades y horas en el pasado: El imperfecto también se usa para expresar la edad de alguien o la hora en el pasado. Por ejemplo:

   "Cuando era niño, tenía cinco años".

   "Eran las cinco de la tarde".

4. Descripciones físicas y emocionales en el pasado: Para describir cómo era alguien físicamente o cómo se sentía en el pasado, usamos el imperfecto. Por ejemplo:

   "Era alto y tenía el pelo negro".

   "Me sentía feliz en aquel entonces".

5. Acciones en progreso en el pasado: El imperfecto también puede indicar acciones que estaban en progreso en un momento específico del pasado. Por ejemplo:

   "Mientras comía, miraba la televisión".

Es común que los estudiantes de español encuentren difícil diferenciar entre el pretérito y el imperfecto, ya que ambos son tiempos pasados. La distinción principal radica en cómo se enfocan las acciones:

• El pretérito se utiliza para expresar acciones puntuales, específicas y completadas en el pasado. Se usa para narrar eventos concretos con un inicio y un final claros.
• El imperfecto, en cambio, se utiliza para describir acciones que eran habituales, continuas o que ocurrieron sin un punto final definido. Se centra en el desarrollo o la duración de la acción más que en su finalización.

Por ejemplo, considera estas dos oraciones:

• Pretérito: "Ayer fui al cine". En este caso, la acción "ir al cine" es específica y puntual, con un inicio claro (ayer) y un final (cuando llegué al cine).
• Imperfecto: "Cuando era niño, iba al cine todos los sábados". Aquí, el imperfecto se usa para expresar una acción habitual y repetitiva en el pasado, sin un punto final específico.

Los marcadores temporales son palabras o frases que suelen acompañar al imperfecto y proporcionan contexto temporal. Algunos ejemplos de marcadores temporales para el imperfecto son: